Llega el otoño y las mareas vivas
Llega el otoño, que acaba de comenzar el 21 de septiembre oficialmente. Las noches se acortan y parece que todo se hace más lento y tranquilo después del verano. Pero en realidad no es así, pues se producen las mareas vivas, con las olas más espectaculares del año.
Ya se, tú estás pensando que el otoño deberíamos hablar de los árboles y lo bonitos que están, si, pero hoy nos apetece mirar al mar.
En Donosti el mar está ahí, contigo, igual no lo ves todos los días, pero cuando no estás aquí lo echas de menos, ¿no te pasa?
Y en septiembre, como sabes, las mareas son más fuertes, con las pleamares y bajamares más extremas y es cuando se producen olazas de esas que tienen una fuerza y una altura que da gusto verlas (desde a cubierto, claro).
Se ha acabado la temporada de playa y ya no hay socorristas y los perros pueden pasear por la arena y jugar con las olas. Los bañistas más audaces y los surfistas ahí siguen y seguirán, que no te quepa duda, aunque el mar se vaya enfriando… pero, ¿hasta que temperatura llega? ¿lo sabes?
Pues en esta época anda por los 15 grados (podéis ver el dato en el periódico) y en invierno si no me equivoco no suele bajar de 12 grados. ¿Te parece mucho o poco?
La foto que he puesto es una que hice del fondo de Ondarreta, pegado al muro del Tenis, en un momento de marea baja. Ya sabes que cuando hay mareas vivas casi casi se puede ver el camino entero hasta la isla. Es uno de esos mitos donostiarras ¿se puede ir andando hasta Santa Clara? Pues no, la respuesta es que casi, pero no, ni siquiera en septiembre.
😉 Lou